sábado, 10 de enero de 2009

La Llorona, todo un clásico

Esta historia es muy antigua, tiene más de 300 años y a pesar de ser catalogada dentro de la ciudad de México, es conocida en todo el país. En cada uno de los estados de la República se tiene una versión de la misma, o por lo menos, una historia relacionada con esta dama de blanco.

Esta leyenda es tan famosa y tradicional, que incluso se ha representado en teatro (Manuel Carpio, Juan de Dios Peza, Vicente Riva Palacio) y más recientemente, se hace referencia a ella en el cine, con la película "Kilometro 31". Basándose en la obra de teatro, se puede decir que apesar de las diferentes historias y relatos, se convenía que los sucesos macabros sucedían al dar las 12:00 am, hora en la que hasta en los barrios más distantes, se escuchaba el grito de la mujer, que siempre vestida de blanco, lloraba por culpa de sus pecados.

Se cuenta que esa mujer, lanzaba un gemido, un grito tan espeluznante, que no existe persona que al escucharlo, no cayera sin aliento al suelo. Varios aseguran haberla visto, pero aún así, quién puede asegurarnos que no es puro cuento...

He aqui la historia:

Ella era una mujer bastante bonita y joven, era esbelta, blanca, con ojos negro azabache ardientes, cabello rizado que caía en sus hombros pálidos, con labios rojos y frescos... su nombre... Luisa.

Era una mujer bella, aunque vivía en un rincón apartado, pobre y obscuro, pero no importando esto, ella, vivía alegre, sin temer a los engaños. Su belleza era tal que muy pronto las altas clases se enteraron de su existencia, no había galán alguno que no intentara acercarse a semejante hechicera.

Aquel oscuro y desagradable rincón de la ciudad, donde ella vivía, se volvió al instante un rincón de trova, donde los jóvenes se reunían en las noches para tratar de atraer su atención, pero como era de esperarse, todo aquello terminaba en riña, pues todos los galanes peleaban por tenerla. Pero a pesar de aquel espectáculo fuera de su puerta, Luisa jamás daba señales de vida, siempre permanecía adentro, sin hacer caso de tanto alboroto.

Pero cuando la calle estaba sola, sin galanes para cortejarla, ella salía en un manto, casi a escondidas de su sombrío cuarto, para encontrarse con un gallardo doncel que caminaba con cautela hasta encontrarla y los dos pasaban las horas, despidiendose al amanecer, para que nadie supiera de ese acontecer.

Un día de aquellos, se fue esparciendo la noticia, Luisa se había perdido por la noche, las puertas de su casa estaban abiertas, aunque no parecia robo, ni algún siniestro, en realidad parecía fuga, o rapto acordado, el chisme no se hizo esperar y mil cosas se dijeron de lo acontecido, de todo se dijo, y muchos aseguraron saber lo que sucedió aunque en realidad, aún era un misterio.

Poco a poco el furor se fue difuminando, la gente se olvidó de Luisa y de lo acontecido, y la calle volvió a estar tan sola, como antes, sin trova, sin galanes, simplemente con la luz de un pequeño farol, que iluminaba la imagen de un santo frente a la casa de aquella.

Pasaron seis años antes de que el misterio saliera a la luz, esto fue lo que pasó:

El amor de Luisa era un hombre muy bizarro, discreto aunque noble al fin, gastador, valiente, franco y con algunos años más que su amada, pues los 30 ya había cumplido, su nombre fue: Nuño de Montes Claros; por su descuido su amor tuvo que callar y apartar del barrio, sin embargo formó un nido, no hizo a un lado su responsabilidad.

Luisa tuvo 3 hijos, producto de su amor, ellos eran rubios, eran su vida, pero poco a poco Nuño fue hiriendola, pues aquella pasión que existía entre los dos se iba desvaneciendo, él se fue apartando, primero días, luego semanas y así... fue entonces que ella comenzó a llorar su pesar, pues había sido abandonada.

Una noche serena, con la luna llena en el cielo y con el toque de queda en el viento, junto a una ventana estaba ella, con hijo entre brazos, tenía la mirada perdida y el semblante pálido, por su cara resbalaba una lágrima que terminaba en la cara de su hijo, quien dormía apasiblemente sin enterarse de lo sucedido, así transcurre el tiempo y ella sigue llorando.

Más tarde esa noche, a lo lejos se escucha el rumor de música, fiesta y baile, ella decide dejar a su hijo en la cuna y salir lo que acontecía, salió con su manto negro y caminó hacia donde se encontraba tal festín, era la casa de su amante y sin más preguntó el motivo de la celebración, a lo que le respondieron sin tardar que esa misma mañana en la iglesia del Sagrario, don Nuño de Montes-Claros había celebrado su matrimonio...

Luisa quedó pasmada, no lloró, no habló, no se movió y así siguió por un rato, después se deslizó a la puerta y entró, subió la escalera de prisa, siguió por un corredor, a muchos llamó la atención, pero sin importar llegó a la puerta de la sala, oculta, observó desde ahí a Nuño y a su nueva dama, riendo y hablando amorosamente, entrelazando sus manos como con sus propias manos...

Aquella noche Luisa regresó a su barrio, a ese rincón obscuro y sin testigos más que el santo alumbrado por el farolillo... se acerca a su antiguo armario, abre un cajón, busca fervientemente hasta que encuentra un puñal que alguna noche dejó olvidado ahí Nuño, lo empuña y por sus ojos pasa un relámpago espantoso, corre al lugar donde sus hijos duermen y loca de dolor y de enojo arranca la vida a los 3, corre con el manto ensangrentado por la ciudad silenciosa, lanzando hondos aullidos.

La gente se apresura a ver el espectáculo, se enteran de lo acontecido y se produce un gran escándalo. A pesar de ser las 12 nadie se aparta de la escena, las madres que la ven, sienten gran furia contra ella por el gran mal que había hecho, Luisa con los cabellos en desorden y el rostro desencajado, caminaba penosamente llevada por dos hermanas de una santa cofradía auxiliar de ajusticiados.

Llega a su destino, mirando hacia abajo, escuchando a los sacerdotes que rezan por ella, pero al subir al patíbulo, alza la cara con espanto y reconoce su casa, se endereza y de sus labios sale un alarido espantoso que a todos infunde terror. Levanta las manos al cielo y se desploma en ese lugar. Cuando la justicia iba a ejecutar el fallo, ella ya había muerto. Murió antes de que alguien le diera muerte.

Desde entonces, por las noches se escucha a Luisa, penando por sus pecados, sin encontrar perdón para su alma, y desde entonces se le conoce mejor como: La Llorona



Otras versiones:

----> Ella es la novia casta que en vísperas de casarse perdió al galán y enloqueció ante el desgarramiento que le ocacionó el fracaso amoroso

----> Ella fue una viuda que a la muerte de su esposo y quedar desamparada, llora por la angustia de ver a sus hijos hambrientos, falleciendo en su presencia, y como no puede hacer nada llora su miseria

----> Es la mujer dulce y buena a quien el marido quitó la vida en un arrebato de celos


Versión de Guanajuato:

En la época en que la minería daba mucho dinero, vivía una joven con una familia rica y opulenta, ella lo tenía todo, belleza y dinero, por lo que los hombres la buscaban día y noche para cortejarla.

Así vivía esta joven hasta que un día, encontraron su cuarto vacío y una cuerda que iba desde el balcón hasta la calle. La nana de la joven fue la primera en dar la alarma... Se hicieron mil conjeturas de lo que pudo a ver pasado pero nadie lo sabía con seguridad.

Pasó el tiempo y de una de las casas que daban al antiguo río de Guanajuato, a las 12:00am, sale una mujer vestida de blanco con un bulto en los brazos, y camina por Cantarras hasta llegar a la Plaza del Hinojo; ahí, en la puerta, lo deposita y es entonces cuando desesperada y espantada por su acción, exhala un alarido desgarrador, que perfora los oidos...

(La mujer quedó embarazada y para que no se supiera, regala el niño y espantada por lo que ella misma hizo, llora y se queja... )

Leyendas basadas en:
José Rogelio Alvarez, "Leyendas Mexicanas", EVEREST, España, Tercera Edición
"Leyendas de Guanajuato", Ediciones Casa Valadés

sábado, 24 de marzo de 2007

Completamente aburrida

Un sábado por la tarde y no hay nada que hacer... en la tele hay puras películas repetidas y aburridas... no me dan ganas de poner una de las mías... realmente el día está muy aburrido.

Pero se me vino a la cabeza una gran idea... prender mi computadora y poner música a todo volumen. ¡Que cambio! Ahora el día parece no ser tan aburrido... :)

Un poco de Avril Lavigne, Panic, café tacuba, Panda, División Minúscula, Fall out Boy, Yellowcard y miles de canciones bailables que se me olvida lo aburrida que estaba...

Aún así... creo que mas tarde será un buen momento para salir...

Por eso les digo... si estan solos y aburridos en sus casas... vayan a un aparato reproductor de música, suban el volumen y olvidense de todo!!!

martes, 20 de febrero de 2007

Una vida sin música no es vida

Esta frase podrá haber sido utilizada por muchas personas, y sólo llegó a la conclusión de que la citan por la una única y sencilla razón de que es la verdad.

Y es que desde muy temprano en la historia del hombre ha existido, al principio para acompañar rituales y más tarde como arte, forma de expresión, de protesta o simplemente comercial. A pesar de los diferentes ritmos, idiomas, instrumentos, sonidos y temas, la música es importante en los distintos momentos de la vida.

Por lo menos en mi vida, la música representa un lugar importante, en este momento, les diré como es un día entero en mi vida y ustedes diran si la música es importante para mí o no lo es. Todo comienza así: desde que me levanto en la mañana prendo el radio, para despertarme y quitarme el mar humor, sólo con oir música, la que en ese momento se encuentre en el radio, me levanto con buena cara.

Después en el trayecto a la escuela, escucho el radio, aunque es una estación de noticias, de repente en los cortes sacan buena música, o en todo caso, te informan acerca de conciertos, aniversarios o notas reelevantes sobre los artistas (músicos, cantantes, grupos).

Luego, cuando llego a la Universidad, como llego temprano, me conecto a mi celular y me la paso escuchando música, hasta que da la hora de la primera clase, entre clases también lo hago, pero solo cuando estoy estresada, cansada, frustrada, enojada o fastidiada, aunque también hay veces que lo hago sólo para sacarme de la cabeza una canción que he traído todo el día "pegada".

Ya al final de el día de escuela, cuando voy de camino a casa, de nuevo escucho el radio, esta vez una estación con puras canciones, nada de noticias ni de locutores, realmente cambio y cambio de estación para encontrar más música.

En la tarde, después de comer, lo que sigue es estar frente a la computadora, así que es de ley poner, el Windows Media Player, el Itunes, el Winamp, o cualquier reproductor, entonces el rato frente al aparato se hará ameno y divertido.

Ya para terminar el día y dormir placidamente, que mejor que escuchar una canción de Alejandro Sanz, y esperar que el próximo día sea un muy buen día.

Es por eso que la frase: "Una vida sin música no es vida" aplica perfectamente en mi vivir. Si ustedes no lo hacen así, aplíquenla un día y verán que disfrutarán más de él.

jueves, 1 de febrero de 2007

¿De quién es la canción?

A México llega música de todo el mundo, de varios géneros y para todos los gustos, sin embargo la mayoría de las estaciones de radio transmiten sólo música pop, lo que obliga a varios cantantes a modificar su género musical para poder entrar al medio y encontrar un poco de fama. Es por esto que si se encuentra a un grupo de música que es bueno pero no logra atrapar la atención del público lo suficiente como para financiar un nuevo álbum, éste simplemente desaparece.

Entonces es cuando nos preguntamos ¿de quién es esta canción?, pues hay veces que los pequeños grupos, o los no famosos, lanzan una canción en género pop para darse a conocer y lograr la difusión de su disco, pero puede no "pegar" y sus esfuerzos habrán sido en vano, no tendrán fama ni dinero para regresar al medio.

Esto aunado a la piratería y al bajar música de Internet, hace que cada día menos grupos salgan a deleitarnos con unas buenas “rolas”, pues como se dan a conocer con una sola canción, mucha gente decide no comprar el disco, comprarlo pirata o bajar el mp3. Bajo estas circunstancias los cantantes no pueden prosperar y el conjunto se desintegra. Por esto es que muchas veces escuchamos una canción que nos gusta mucho, descubrimos quien la canta pero para el próximo mes, ni la banda ni el disco existen más.

La mejor música para escuchar

Los géneros musicales muchas veces describen la actitud o personalidad de quien los escucha, pero no siempre aciertan. Normalmente la clasificación es la siguiente:

El pop es sólo para los fresas o personas "nice", que se dejan llevar por lo que está de moda; el rock (alternativo o pesado) es para los rebeldes, inadaptados o valemadristas, cuando éste es en inglés u otro idioma, normalmente son personas que lo primero que harían si pudieran sería salir del país; la musica banda, norteña, salsas y demás es mejor conocida como música de "nacos", gente de bajos recursos o al contrario de mucho dinero producto de algún trabajo ilícito.

Yo pienso que esta clasificación va a los extremos, no se puede generalizar de esta manera, pues hay demasiados géneros como para poder clasificarlos a todos, además existen muchas personas a las que les gusta toda la música no importando el género, puede ser porque tienen un criterio muy amplio o una personalidad multifacética. El punto es, no importa el tipo de música que te agrade si tú te sientes agusto escuchándola.

Otro punto importante es que todos creen que el género de su agrado es el mejor para ser escuchado, yo diría que no es tanto el género si no es más bien la composición, por ejemplo existen cantidad de cantautores que son dignos de ser escuchados, mientras que hay cantantes plásticos que sólo representan mercadotecnia, también se conocen caciones de una letra especial y llegadora en contraste con otras vacias y repetitivas. Viendo las cosas desde aquí es fácil llegar a la conclusión de que lo mejor para escuchar es aquello que tenga mayor calidad.

Pero no a todos nos sirve la misma música, entonces existe otra opción para clasificar la música, y se trataría de poner la canción correcta en el momento correcto, dependiendo de tu ánimo, es decir, si vas a bailar las salsas, si estas enamorado las baladas, si quieres olvidarte de todo y reventarte un poco el alternativo, si quieres concentrarte la música clasica, etc.

La música es buena, te ayuda en demasía y de muchas formas te representa, por eso es importante impulsarla y apoyar a nuestros grupos y cantantes favoritos para que sigan con su trabajo, haciendo más relajada, alocada o entretenida, nuestra vida.